Según este libro “Endocrinología: An integrated Approach”, que está disponible gratuitamente en la estantería del NCBI http://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK20/ ) en el capítulo 1:
Las hormonas pueden derivarse de los aminoácidos. Estas son las hormonas proteínicas o péptidas que se componen de un número muy pequeño de aminoácidos hasta más de 200. Un ejemplo de esas hormonas sería la insulina o las hormonas de la pituitaria anterior.
Hormonas como la insulina, GH (hormonas de crecimiento) y IGF-I (factor de crecimiento similar a la insulina) juegan un papel importante en la regulación del metabolismo de las proteínas 1 .
Las hormonas también pueden derivar del colesterol (ex vitamina D, hormonas suprarrenales o gonadales), de los ácidos grasos/fosfolípidos (ex prostaglandina, prostaciclina), del triptófano (ex melatonina, serotonina) o tirosina (ex catecolaminas como norepinefrina o epinefrina)
Hace algunas décadas, los fitoestrógenos se han descrito cada vez más en las plantas. Según Patisaul et al: Los fitoestrógenos son compuestos vegetales naturales que son estructural y/o funcionalmente similares a los estrógenos de los mamíferos y sus metabolitos activos. En su trabajo, describe los papeles potenciales de estos fitoestrógenos 2
Referencias
- Umpleby AM et al, El control hormonal del metabolismo de las proteínas. Baillieres Clin Endocrinol Metab. 1996 Oct;10(4):551-70.
- Patisaul HB, Jefferson W. Los pros y los contras de los fitoestrógenos. Fronteras en neuroendocrinología. 2010;31(4):400-419. doi:10.1016/j.yfrne.2010.03.003.